Cuando vemos una vaca, casi nunca pensamos que este animal, aparte de leche, nos ofrece un producto muy importante: el cuero. Gran parte del calzado que usamos a diario esta hecho con piel de vaca.
Ahora bien, para elaborar los zapatos de cuero no es suficiente con tener vacas. Para transformar la piel de las vacas falta el trabajo de muchas personas. En primer lugar, es necesario que, una vez sacrificada la vaca, alguien se encargue de curtir o preparar su piel para obtener el cuero que, después, otras personas van a utilizar en las fábricas como materia prima para confeccionar los zapatos. Luego, intervienen los diseñadores y los operarios, que se encargan de realizar las fases siguientes de fabricación. Por último, unos transportistas llevan los zapatos desde las fábricas a las zapaterías o tiendas de calzado. Pero, además, todo esto no funcionaría sin el trabajo de los administrativos, que se encargan de gestionar las compras de todo lo necesario para fabricar los zapatos y las ventas a las tiendas. Como ves, para transformar la piel de una vaca en un par de zapatos se necesita la participación de muchas personas, que lleven a cabo trabajos muy distintos.
Trabajo realizado por:
Adriana
Raquel y
Ana